El presidente Gabriel Boric afirmó que su gobierno está desplegado en las zonas afectadas para asistir a las familias damnificadas. Según el mandatario, un centenar de personas han sido evacuadas y reubicadas, mientras los bomberos continúan combatiendo 27 focos activos.
Decenas de incendios forestales, avivados por fuertes ráfagas de viento, mantienen en alerta a la zona sur de Chile, donde se han consumido alrededor de 2.000 hectáreas y al menos 20 viviendas, según informaron las autoridades.
El ministro del Interior, Álvaro Elizalde, calificó la situación como "compleja" y aseguró que se han desplegado todos los recursos disponibles, incluyendo brigadas y equipos especializados, para combatir las llamas. Hasta el momento, no se han reportado víctimas fatales ni heridos como consecuencia de los incendios, que comenzaron la tarde del domingo.
Las regiones más afectadas son Ñuble, Biobío, La Araucanía y Los Ríos, donde los incendios han avanzado rápidamente debido a los vientos del este, conocidos localmente como "puelche", con ráfagas de más de 60 km por hora.
Traiguén, en la región de La Araucanía, es la localidad más golpeada, con 1.000 hectáreas consumidas por el fuego. En esta zona, ocho viviendas resultaron dañadas y un recinto escolar sufrió importantes pérdidas materiales. Afortunadamente, el liceo logró ser evacuado a tiempo y 25 personas, entre estudiantes y funcionarios, fueron trasladadas a un albergue temporal.
En los últimos años, Chile ha sido escenario de devastadores incendios forestales, con graves consecuencias tanto en áreas urbanas como rurales. Uno de los siniestros más mortales ocurrió el 2 de febrero de 2024, cuando múltiples incendios simultáneos en Viña del Mar dejaron 137 muertos y 16.000 damnificados, convirtiéndose en el segundo incendio más letal del siglo a nivel mundial.
