De acuerdo con la historia, Jesús murió crucificado con una corona de espinas y la inscripción “INRI”. Sin embargo, datos históricos y científicos revelan más información sobre el día y la hora exacta de su muerte.
Según la Biblia, Jesucristo, el Hijo de Dios, murió un viernes (como dice la Biblia, en la Pascua judía) y existen datos históricos y científicos (astronómicos) de los que se deduce hasta la hora.
De los siete años entre el 29 d.C. y el 36 d.C., cuando Caifás (quien según la Biblia condenó al Mesías) era sumo sacerdote en Jerusalén, solo en dos el inicio de la Pascua (en que ocurrió la crucifixión) se celebró un viernes: 7 de abril del 30 d.C. y 3 de abril del 33 d.C.
Si Jesucristo predicó entre dos y tres años, queda que murió en el año 33, que coincide con un eclipse lunar que Poncio Pilato (prefecto romano en Judea que mandó crucificar a Jesucristo) mencionó en una carta al emperador Tiberio.
Entonces, las horas del día se dividían en cuatro —tercera (9 a.m.), sexta (12 p.m.), novena (3 p.m.) y doceava (6 p.m.)—, y si la Biblia habla de la novena como la hora en que expiró el Hijo de Dios se concluye que Jesús murió a las 3 de la tarde.
Con lo indicado, compatible con el Evangelio del apóstol Juan (y lo que no se contradice con lo mencionado por los otros apóstoles), Jesucristo habría muerto el viernes 3 de abril del año 33 d.C. a las 3 pm.
Dato
La hora de la muerte de Jesucristo coincide con la del sacrificio de corderos en la Pascua. Cuando a Jesús se le llama el Cordero de Dios en Juan 1:29 y Juan 1:36, es en referencia a que Él es el perfecto y último sacrificio por el pecado.