Comentarios a vuelo de pájaro
AYER murió Alberto Fujimori, a los 86. de años de edad. De los cuales, 24 los pasó en la cárcel condenado por violar derechos humanos. Fue liberado hace ocho años gracias a un indulto que PPK le concedió por razones humanitarias. Nos guste o no, el Perú que el nuevo milenio recibió, con una economía estable y creciendo y con un Sendero Luminoso derrotado- lo dejó él. Que hubo corrupción y excesos en la lucha contra el terrorismo durante sus diez años gobierno, innegable. Eso tampoco desmerece lo otro. Por más que la caviarada chille o diga lo contrario. Ellos también ya están en retirada.
º MUERTO Fujimori, ¿qué va a pasar ahora con el fujimorismo? ¡Nada! A lo mejor se fortalece. Algunos muertos resucitan emociones desde sus tumbas, a la vez que refrescan la memoria para que sus legados no se esfumen con ellos. Que es justamente lo que puede ocurrir con Fujimori. Nos guste o no. Aunque esto tampoco depende de gustos. La memoria colectiva es así. Tiene sus misterios.
º SI bien es cierto que el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) resolvió no vacar a Madrid como alcalde de Piura, a pesar de que la causal de esa solicitud estaba más clara que el agua, dicha exculpación no le borra la mancha, el pecado cometido, la transgresión perpetrada. Ni lo hace mejor persona de la que no es.
º AHORA anda circulando por las redes sociales otra denuncia contra él. Una que lo muestra implicado en otra corruptela bajo estas figuras delictivas: negociación incompatible, aprovechamiento indebido del cargo, conflicto de intereses políticos, tráfico de influencias y colusión. ¿Y qué fue lo que nuevamente hizo este bendito Madrid?
º OTORGARLE al esposo de una persona -Angelina Castillo Saldarriaga, de Sullana y políticamente muy ligada a él- la supervisión del Parque de las Aguas y, a la vez, designar a esta gerente de la Beneficencia Pública de Piura, además de haberla hecho candidatear, en el 2022, a la vice gobernación regional en la lista que encabezó Reynaldo Hilbck y presentó su movimiento, del cual, la susodicha, era también la secretaria general a nivel regional. Como reza el dicho: “Son cosas del Orinoco, que tú no sabes ni yo tampoco”. Aunque en este caso, sí.
º ESA obra del Parque de las Aguas la impuso Madrid a fuego y sangre, y con la cerrada oposición de la casi totalidad de los vecinos de lo que fue el antiguo parque “Néstor. S Martes”. Con la excepción de algunas familias colindantes, como la de los descendientes del mismo Martos -emparentada con el arquitecto que Madrid tiene como subgerente de Estudios y Proyectos- y la de los Alvarado entroncada con el economista que Madrid también tiene como gerente municipal. Para que todo quede en familia.
º EL afortunado esposo de la antes mencionada Angelina Castillo Saldarriaga se llama Joy Killer Villarán Zagaceta, y el contrato que éste firmó con la municipalidad de Piura y lo ayudó a salir de apuros, a mejorar el rancho y, seguramente a compartir, por eso que le decía Toledo a Barata: “Paga carajo”, ascendió a más de medio millón de soles. Para Villarán, aquello significó como sacarse la lotería o ver aparecer a la Virgen María. Y para su cónyuge, con quien lleva casado diez y ocho años, eso también fue algo así como: “te lo dije amor”.
º EN buen cristiano, Madrid sentó alrededor del mismo plato -el Parque de las Aguas- al esposo de su socia política y a un viejo conocido desde la época en que fue alcalde de Tambogrande, un tal Wilson Calva Villegas. Al primero, para la supervisión de la mencionada obra, como ya está dicho y, al segundo, para que la construyera. Calva es dueño de la empresa Fuerte Roble de Sullana. ¿Pura coincidencia? ¡No! Sólo en las películas ocurre eso cuando en ellas se advierte con este epígrafe lo siguiente: “Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia”. Aquí no.
º LO antes resumido ha tenido como fuente el portal Noticias Piura que termina invocando, después de lo narrado, la intervención del Ministerio Público, de la Fiscalía de la Nación y, en particular, de la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de funcionarios públicos de Piura. Exhortar a estas instituciones a que hagan su trabajo, cumplan con la ley, se fajen por ella, sería como pedirle peras al Olmo. Cojean del mismo pie en que lo hace el Jurado Nacional de Elecciones. La putrefacción invade a este país nuestro.
º Y como dice hoy Aldo Mariátegui en su columna de Perú 21: “Mucho de toda esta degradación actual proviene también de que las élites y los medios se han prestado adrede a envilecerse para ser más populares o vendedores”. Nada de eso o de que “cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia”.
HASTA MAÑANA