Denuncian violación de derechos humanos. Organizaciones de derechos civiles denuncian la deportación de menores ciudadanos estadounidenses, incluyendo un niño de 4 años en tratamiento oncológico, tras ser detenidos con sus madres durante controles migratorios en Luisiana.
Tres niños nacidos en Estados Unidos fueron deportados a Honduras junto a sus madres migrantes, en medio de la indignación de defensores de derechos civiles e inmigrantes. Uno de los menores, de apenas 4 años, se encontraba en pleno tratamiento contra el cáncer.
Según informaron la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) y el Proyecto Nacional de Inmigración (NIP), los casos involucran a una madre deportada junto a su hijo de 2 años y otra madre obligada a regresar a Honduras con sus dos hijos de 4 y 7 años, todos ciudadanos estadounidenses por nacimiento.
Las deportaciones se produjeron tras ser detenidas durante citas rutinarias con autoridades migratorias en Luisiana, como parte del Programa de Comparecencia bajo Supervisión Intensiva (ISAP).
Los abogados de las familias y organizaciones denunciaron que estas acciones ponen en riesgo la vida y el bienestar de los menores, especialmente del niño de 4 años que estaba recibiendo atención médica por cáncer metastásico: “Se trata de una grave violación de derechos fundamentales y de las propias leyes migratorias estadounidenses”, advirtieron en un comunicado conjunto emitido el viernes.
El caso ha generado un amplio rechazo entre activistas y expertos legales, quienes exigen una revisión urgente de las políticas de detención y deportación, así como garantías para la protección de menores ciudadanos estadounidenses en situación vulnerable.