Por. Jesús Cabel
Ha transcurrido más de un siglo y cierto silencio cómplice del olvido persiste sobre la poesía y prosa de Julio Garrido Malaver. No voy a referirme a esa larga lista de antologías que han venido apareciendo aquí y allá, pero que prácticamente de la denominada generación que se inicia en los cuarenta y se consolida en el cincuenta su nombre ha sido dejado de lado del mapa poético del país. Ironías que presenta la ignorancia o la pereza por investigar a fondo por nuestros aedas que se han forjado en las latitudes más extremas del Perú. Lo cual, felizmente dejará de pie y de manera solemne la palabra poética verdadera.
Bethoven Medina, talentoso poeta y antólogo, tanto como el que escribe estas líneas, tuvimos el privilegio de conocer y tratar personalmente al maestro, durante varias décadas. Su obra: Julio Garrido Malaver: poesía y sus ejes temáticos no solo es fruto de un estudio serio, continuado y persistente, sino también de la admiración y devoción por el poeta que ha logrado escribir más de un centenar de libros. Desde el título puede advertirse que los llamados “ejes temáticos”, que en este caso son siete, cada uno de ellos se relaciona con los otros, pues no solo comparten un mismo plano sino que es una forma de ordenar y entender la poesía, presentar un guión básico que aporta una unidad total al entendimiento de la poesía. Es así como puede advertirse la presencia de conceptos, principios, procedimientos actitudes y valores.
Asimismo, estos ejes, que parten desde su vigencia y trascendencia andina –considerando su lugar de nacimiento- pasando por lo referente a la agricultura, familia, migración, poética elemental, identidad e infancia y madurez, sostienen y organizan la propuesta de Medina en cuanto al contenido y proyección de la poesía de excelencia de Julio Garrido Malaver.
¿Y qué nos revela esta poesía? A un poeta indesmayable en el propósito de acercarnos al hombre en su integridad, que postula un lenguaje accesible pero singular y por eso diferente, que revela honda preocupación social, su posición e interés por los más necesitados, fervor por la naturaleza, su canto a la niñez en todo su esplendor, el testimonio vivo de la esperanza, y principalmente alejado de las camarillas intelectuales de ocasión.
Su trayectoria de poeta es innegable e inmejorable, apostando siempre por el cambio, por la palabra exacta que devele al hombre en toda su dimensión. Homenaje al maestro y al eterno poeta.
