Libertad de religión: El derecho a la libertad de religión y creencia se encuentra consagrado en la Declaración Americana de los DD.HH.
¿Qué comprende el derecho a la libertad de religión y creencia? . Comprende, de acuerdo al último informe «Estándares Interamericanos sobre Libertad de Religión y Creencia» publicado este jueves, al menos las siguientes libertades:
La libertad de tener y conservar la religión o las creencias de la elección de cada uno.
La libertad de cambiar de religión o de creencias.
La libertad de manifestar la propia religión o las propias creencias, individual o colectivamente, tanto en público como en privado.
La libertad de practicar el culto o de celebrar reuniones en relación con la religión o las convicciones en lugares para esos fines.
La libertad de observar días de descanso y de celebrar festividades y ceremonias de conformidad con los preceptos de una religión o convicción.
La libertad de fundar y mantener instituciones de beneficencia, humanitarias y de enseñanza.
La libertad de confeccionar, adquirir y utilizar en cantidad suficiente los artículos y materiales necesarios para los ritos o costumbres de una religión o convicción así como la de escribir, publicar y difundir las publicaciones pertinentes.
La libertad de capacitar, nombrar o elegir los dirigentes que correspondan según las necesidades y normas de una religión o convicción y de comunicarse con individuos y comunidades en los ámbitos nacional e Internacional.
El derecho de los padres y, en su caso, de los tutores legales a que sus hijos e hijas o pupilos reciban la educación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.
El estudio
El derecho a la libertad de religión y creencia se encuentra consagrado en la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre (artículo III) y en la Convención Americana sobre Derechos Humanos (artículo 12). Ahora, vea el estudio:
En las Américas se registran diversas violaciones al derecho a la libertad de religión y creencia, en conexión con otros derechos humanos, y en relación con distintos grupos en situación de vulnerabilidad. En este sentido, el estudio presenta los desarrollos de los órganos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos —la CIDH y la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH)— sobre este derecho, desde una visión que postula la universalidad, inalienabilidad, indivisibilidad e interdependencia de los derechos humanos.
La metodología seguida para la elaboración del estudio consistió en la revisión, sistematización y análisis de los estándares contenidos en informes (de fondo, de país, temáticos, anuales, entre otros) y otros documentos (resoluciones, principios, declaraciones, entre otros) aprobados y publicados por la CIDH y en sentencias y opiniones consultivas pertinentes de la Corte IDH.
Asimismo, respecto de algunas temáticas aún no abordadas en detalle en el marco de los informes temáticos y de país o del sistema de peticiones y casos, se incluyen pronunciamientos emitidos en comunicados de prensa. También se incluyen informes de admisibilidad, en los que la CIDH ha considerado que los hechos relatados podrían configurar, prima facie, violaciones al derecho a la libertad de religión y creencia.
En la elaboración del estudio se aplicaron los enfoques de género y étnico-racial, así como la perspectiva de la interseccionalidad, a los efectos de dar cuenta de las diferentes realidades que enfrentan los grupos en el ejercicio de este derecho humano en la región.
De este modo, el estudio reúne la jurisprudencia sobre libertad de religión y creencia de la CIDH y la Corte IDH, de fuerza vinculante, así como las opiniones consultivas de este Tribunal y otros pronunciamientos de la CIDH con efectos jurídicos.
Finalmente, el estudio se complementa con los estándares en materia de libertad de religión y creencia desarrollados en el sistema universal de derechos humanos. La CIDH agradece los aportes de la Relatora Especial sobre libertad de religión o de creencias de Naciones Unidas, Nazila Ghanea.
Con la publicación de este estudio imparcial y de alto rigor técnico, la CIDH busca aportar elementos a los debates necesarios para avanzar en el respeto y la garantía del derecho a la libertad de religión y creencia, en sociedades plurales y democráticas.