La gobernadora Gilia Gutiérrez calificó de irresponsable al ministro Ángel Manero y lo acusó de enfrentar a las autoridades locales. Moquegua demanda una distribución equitativa del agua y medidas contra la contaminación del río Coralaque.

La gobernadora regional de Moquegua, Gilia Gutiérrez, rompió en llanto este sábado durante una mesa de diálogo en presencia del ministro de Economía, José Arista. El encuentro se desarrollaba en medio de un paro que lleva casi diez días, en demanda de soluciones a la problemática ambiental de la zona.

Visiblemente molesta, Gutiérrez pidió la renuncia del ministro de Desarrollo Agrario y Riego, Ángel Manero, quien había ratificado que la futura represa de Yanapuquio será exclusiva para Arequipa, mientras Moquegua exige una distribución equitativa del agua.

Manero declaró que, además, que en compensación, Moquegua contará con 60 millones de metros cúbicos de agua distribuidos en tres nuevas represas. En el sur peruano, Yanapuquio se ha convertido en un símbolo de la creciente tensión entre ambas regiones, por lo que el pasado 3 de diciembre Moquegua inició un paro para exigir soluciones ante esta situación y frente a la contaminación del río Coralaque, atribuida a las operaciones de la minera Aruntani.

La gobernadora calificó a Manero de irresponsable y lo acusó de enfrentar a las autoridades locales. “Un ministro irresponsable acaba de señalar que está esperando una respuesta mía para reunirse el día 12 en Piura para poder conversar de Yanapuquio. Había aceptado, pero le digo no, porque Yanapuquio se habla en Moquegua. Aquí lo vamos a esperar. Le exijo que esté mañana aquí, a más tardar; caso contrario, no volveremos a hablar con el ministro”, afirmó.

Gutiérrez aseguró que está dispuesta a ir a Lima y tomar medidas drásticas si es necesario para defender los intereses de Moquegua. “Si tengo que encadenarme en Lima para que nos escuchen, mañana me voy a Lima con mis alcaldes y me encadeno porque Moquegua se respeta. Los derechos e intereses de Moquegua no se negocian, se defienden”, concluyó entre lágrimas.

Más leídas