Pobladores y conductores se han quedado aislados por la crecida del río Santa, en Áncash tras las fuertes lluvias e hizo que varias carreteras se vean interrumpidas.
En el mes de febrero se ha reportado el pedido de ayuda de pobladores de Áncash para reforzar las vías de esta región debido a que las fuertes lluvias y los huaicos han destruido las carreteras en diversas partes.
Los más afectados son los transportistas debido a que muchas vías han quedado severamente dañadas, ya sea porque hubo deslizamiento de tierra de los cerros o porque una parte se ha derrumbado y han quedado detenidos.
Karla Pamela Alejos Benites, presidenta de la Asociación de Transportistas Interprovinciales de Áncash (ATIA), hizo esta denuncia pública y reitera la solicitud de apoyo a las autoridades del Gobierno Regional y del Estado para que declaren el departamento en emergencia.
Pueblos aislados y transportistas temen por sus vidas
La representante de la ATIA sostuvo que la situación es precaria en la provincia de Macate, ya que la vía que conecta la sierra y la costa de Áncash está prácticamente cerrada. Hay altas probabilidades de que las poblaciones de la zona se queden aisladas a causa del incremento del caudal del río Santa.
El caudal del río y las lluvias hacen que se destruyan fácilmente. "Necesitamos la declaratoria de emergencia en nuestras carreteras de la región Áncash, ya que tenemos vías interrumpidas”, expresó Karla Alejos.
También dijo que hicieron este pedido al Ministerio de Transportes y Comunicaciones a través de un documento oficial, pero no han recibido ninguna respuesta todavía. “Las lluvias son constantes, están dejándonos sin pase, también tenemos la de Huaraz y Pallasca. Nos están dejando aislados”, comentó.
